Sentate en el sillón. Tocá la guitarra, mirame, vaciá el mate.
Seguí pensando que en mi cabeza bailas.
Seguí pensando que estas ahí...cuando de a poco
te vas.
No te vas caminando, ni corriendo.
Te das vuelta y das pasos hacia atrás.
Como si pudiera seguirte, solo por el hecho de mirarte a los ojos.
Mis ganas de un abrazo te extrañan cada vez menos.
La huella de tus ojos no aparece más cada vez que parpadeo.
Y van...
Miércoles 21 de Diciembre. 12:43 am.
Gostei do que li aqui, parabéns!
ResponderEliminar