sábado, 24 de julio de 2010

Tensión superficial.

Es solo una gotita de aire que te falta para ser feliz.
La gotita más importante.
La que te llena un pulmón, la que vuela esa pestaña caída y desarma el diente de león.
Te encoje, te abraza en escalofríos y te invita a derramar lágrimas interminables; como si eso, en algún momento, vaya a terminar.
Ni recuerdos, ni saludos, ni miradas ni besos nocturnos, robados. Nada hace que esa gotita sea reemplazada.

Se enoja, te empuja. Y sonríe...pero sin que la veas.
Te respira.
Te extraña.
Te odia...¿hay algo mejor, más placentero, que ese minuto antes de dejar de querer?
¿Terminaste?
Yo no. Nunca voy a terminar.

Porque nunca creo haber comenzado...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

gossiper